BENTHAM, JEREMY
El gobernante que contribuye a que la justicia sea inaccesible, el recaudador que irrumpe en el hogar esgrimiendo una tasa judicial, es un encubridor de todo crimen: todo villano puede saludarle como a un hermano y todo malhechor puede enorgullecerse del él como de un compinche.
Si aplicáramos esto a las intenciones incurriríamos en calumnia y exageración. Pero se trata de una incontrovertible y desnuda verdad si, dejando a salvo la conciencia criminal y los motivos dolosos, nos limitamos a los efectos y consecuencias de esas tasas.