ARANA, DANIEL
Estos primeros Tratados, o Caminos un libro que, aun escrito, puede estar sin
escribir, a falta de, o en progreso, dado que el lenguaje aún existe y se interrumpe
a sí mismo- nombre extraño para lo que es, sin otra cosa, una estricta llamada
a las palabras desde su mortal imposibilidad, nacen del anhelo por ese decir de
lo indecible, en una espiral envuelta en medio del vacío, del blanco. Un camino
que es, por sí mismo, acontecimiento, ansiedad feliz o acuciosa, tanto proyectada
en las palabras como recibida de ellas, descubierta, de forma deliberada, en el
uso del lenguaje y que atestigua una relación con el mundo en eterno, intenso
cuestionamiento [
] A partir de la segunda mitad del siglo XX, el pensamiento
literario y filosófico ya no persigue lo que no se puede decir como la fuente de
una posible revelación que le permitiría eventualmente dominar el origen y, por
la misma razón, la muerte- sino más bien como el lugar de un encuentro con la
imposibilidad, el silencio y la alteridad.