ALFARO, CARLOS
Queríamos ver arder el mundo
y mirarlo
desde la cama que nos contemplaba.
Entonces me di cuenta de que no era el mundo quien ardía
sino nosotros
y lo que a mi me afectaba
eras tú.
No te podía hacer corpórea después de eso
entonces te hice líneas y papel
y te dejé plasmada
en algún lugar
por si al leerlo volvías a la cama.
Y entonces sí,
veríamos al mundo arder
sin nosotros en las llamas.