SANTO TOMÁS DE AQUINO
La ley mueve a obrar con rectitud. Mover a obrar, es segun se desprende de lo dicho en otro lugar, propio de la voluntad. La ley, por lo tanto, mas bien que acto del entendimiento, lo sera de la voluntad, como asimismo parecen indicarlo estas palabras del Jurisconsulto: La voluntad del principe tiene fuerza de ley.