ZABALZA BERAZA, MIGUEL ÁNGEL / ZABALZA CEREIRIÑA, MARÍA AINOHA
Extracto del Índice:
PRÓLOGO. Maestros en mi vida. Enrique Martínez Reguera
I. LA DOCENCIA EN UN MUNDO EN CAMBIO. Algunos dilemas básicos.
II. EL PROFESORADO EN EL CALEIDOSCOPIO.
Los profesores como Personas: La persona que enseña; núcleos de satisfacción e insatisfacción personal y profesional; la carrera profesional. Personas que enseñan a ser personas.
Los profesores como Profesionales: La enseñanza como profesión ambivalente, como espacio de intervención profesional y como profesión especializada. La formación de profesores. Los estudiantes, referente de la acción docente. Deontología profesional.
Los profesores como Trabajadores: De la mística al contrato. Relaciones interpersonales y clima laboral. Satisfacción y motivación en el trabajo.
III.¿EXISTEN LOS BUENOS PROFESORES? ¿CÓMO SON? ¿DÓNDE ESTÁN?
Compromisos consigo mismo y con el propio desarrollo personal. Conocimientos. Cultura profesional. Tacto pedagógico. Trabajo en equipo. Compromiso social.
El ecosistema escolar ha ido cambiando al mismo ritmo que cambia el mundo, la realidad, la vida. Y no ha quedado al margen de este cambio y esta complejidad el propio perfil del docente, lo que se espera de los profesores y profesoras del siglo XXI. Las características de una nueva identidad docente, acorde a las demandas del momento presente es la idea clave que conforma este libro sobre el nuevo profesorado. Con él los autores pretenden hacer públicas algunas reflexiones
surgidas de su experiencia como profesores y como formadores.
El libro lleva por subtítulo la disyuntiva ?Entre el SER y el ESTAR?. Toda profesión tiene mucho de ESTAR, de ejercitar el rol, de jugar al personaje. Pero la educación pide más. SER docente es otra cosa: lo llevas en el ADN, lo vives, te acompaña cada momento del día, lo disfrutas y lo sufres por partes iguales; te atrapa.
Esta obra recorre distintas facetas de esta poliédrica vocación, recordándonos que actuar como profesor o profesora es, desde luego, una responsabilidad pero es, también, algo que se disfruta porque está cargado de emoción, creatividad y desafíos. Ésa es la idea.